¿Qué cantan los poetas andaluces de ahora?
¿Qué miran los poetas andaluces de ahora?
¿Qué sienten los poetas andaluces de ahora?

Cantan con voz de hombre..
¿pero dónde los hombres?

..con ojos de hombre miran,
¿pero dónde los hombres?

..con pecho de hombre sienten,
¿pero dónde los hombres?

Cantan, y cuando cantan
parece que están sólos...

Miran, y cuando miran
parece que están sólos...

Sienten,..y cuando sienten
¡parecen que están solos!..

¿Es que ya Andalucía
..se ha quedado sin nadie?

¿Es que acaso en los montes andaluces
..no hay nadie?

¿Es que en los mares y campos andaluces..
no hay nadie?

¿No habrá ya quien responda a la voz del poeta?
¿Quien mire al corazón sin muros del poeta?

¡Tantas cosas han muerto..

que no hay más que el poeta!

¡Cantad alto!
..Oiréis que oyen otros oidos.

¡Mirad alto!
Veréis que miran otros ojos...

¡Latid alto!
..Sabréis que palpita otra sangre...

No es más hondo el poeta..
en su oscuro subsuelo, encerrado...
Su canto asciende a más profundo
cuando , abierto en el aire..,
ya es de todos los hombres...

Rafael Alberti

Tercer Encuentro

viernes, 30 de agosto de 2013

Maldigo


Maldigo

Maldigo, sí, maldigo ese reloj pendenciero
que se alía arbitrario, con el volar de la tarde,
y no nos regala ni un amanecer más,
ni un quejido que rescate su gracia a la madrugada.

Maldigo a lo imposible por su cerrada voluntad,
por su mirar celoso de esbirro encorsetado.
Y a esa tormenta furiosa de sentimientos
que despierta a la culpa en su conciencia.

Me maldigo, sí, me maldigo en este instante,
ingenuo, que me hechiza, me domina
llevándome inconsciente al reino de tu sonrisa
donde mi piel respira la fragancia de la tuya.

Te maldigo a ti, por enamorarme sin piedad
por tenerme sin tenerme, sin tenerte...
Por alimentar esta sed desesperada
con unos pocos momentos robados...

1 comentario:

Francisco Espada dijo...

Comprendo tu rabia, Antonia, y admiro tu intenso poema, sólo que yo no conjugo la palabra maldición, no es de mi uso; pero no resta nada a la belleza, sino que le suma fuerza. ¡Felicidades!